El diseño de vestuario de Wicked no solo cumple una función estética, sino que también está cargado de simbolismos que enriquecen la narrativa de la historia. En el caso de Elphaba, sus prendas presentan tejidos que evocan la corteza de los árboles y patrones inspirados en hongos, reflejando su conexión con la naturaleza y su espíritu indomable.

Estos elementos visuales ayudan a reforzar su carácter rebelde, su fuerza interior y su distanciamiento de las normas impuestas por la sociedad. Cada textura y color en su vestimenta contribuye a mostrar su evolución emocional y su lucha por la identidad.

Por otro lado, Glinda viste atuendos llenos de brillo, tonos claros y detalles delicados que representan una feminidad poderosa, elegante y estratégica. Este contraste entre ambas protagonistas no solo define sus personalidades, sino que también convierte al vestuario en una herramienta narrativa clave dentro de la historia.