The Little Mermaid debe evitar el CGI
Fuente: Disney

El live-action de la princesa Ariel está cada vez más cercano a su estreno, pero los efectos no deben caer en lo que hicieron con ‘The Lion King’, es decir que ‘The Little Mermaid’ debe evitar el CGI y cuidarlo mucho más.

Para evitar las críticas en respuesta al estreno de ‘The Lion King’, los creadores y equipo de post producción de ‘The Little Mermaid‘ debe tener un mayor cuidado para los efectos visuales de la película.

El director Jon Favreau llevó la historia clásica de Disney a un hiperrealismo impresionante; desafortunadamente, por la naturaleza de la película fue contraproducente, ya que los animales tenían cero expresiones faciales, como sería en la vida real, y eso le quitó peso a ciertas escenas emotivas.

Algunos de los momentos más emotivos de la película animada es la reunión entre Simba y Nala, la expresión de ambos leones acerca al público a la emoción de los amigos reencontrándose.

Otra claro es la muerte de Mufasa. Cuando el pequeño Simba va al cadáver de su padre y trata de despertarlo es desgarrador y a más de uno le saca una lagrima. Sin embargo, en el live-action esto no pasó.

Las escenas animadas y el CGI de ‘The Little Mermaid‘, deben ser aún más cuidadas. Con el efecto del agua, con el cabello y los animales nadando, puede parecer menos importante la misma cuestión de las expresiones faciales de los animales.

Aunque Ariel, Ursula y Eric tienen rostro humano, gran parte de la narrativa de la historia recae en Sebastian, Flounder y Scuttle. Escenas como ‘Under the Sea’ y ‘Kiss the Girl’, podrían ser duramente juzgadas si dejan al cangrejo, que no es un animal con gran capacidad expresiva, sin alguna alteración animada.

A estos personajes se debe sumar la gran cantidad de fauna marina que sirve como apoyo visual en los números musicales y no olvidar a Flotson y Jetson, los malvados ayudantes de Úrsula.

En conclusión, para evitar las duras críticas que recibieron en el pasado, ‘The Little Mermaid’ debe evitar el CGI y se espera que agreguen algo de fantasía a la animación realista, sin mencionar una gama de color más llamativa para poder envolver al público en el mundo de Ariel y volverlo parte de el.