Ha sucedido una tragedia para los amantes de comer sin ropa, pues el primer restaurante nudista de París cerrará sus puestas en febrero, tras poco más de un año de servir cenas a gente que no usa prendas de vestir.
O’Naturel abrió para satisfacer la necesidad de un sector francés que gusta de estar desnudo y realizar varias actividades de la vida diaria, sin embargo no dio los resultados esperados.
Así que a través de redes sociales el restaurante nudista informó que pronto tendría que cerrar el peculiar establecimiento. “Agradecemos su participación en esta aventura, viniendo a cenar al O’Naturel”, publicaron en cuenta de Facebook.
“Reserven rápidamente para disfrutar de una última cena desnudos en París. ¡Ahora o nunca!”, escribieron sus propietarios, los gemelos Mike y Stéphane Saada, quienes no practican el nudismo y servían las mesas vestidos.
Pare esta ocasión especial proponen dos menús de 44 y 56 dólares.
En local que no conoce los pudores, una gran cortina blanca impide ver la vitrina del restaurante, disimulado en una calle tranquila. Los clientes dejan sus prendas en el guardarropa de la entrada, quedándose solo con las zapatillas que proporciona la casa, excepto las mujeres que prefieren dejarse puestos los tacones.
El primer restaurante nudista de París anunció que cerrará sus puertas el mes que viene, tras poco más de un año funcionando, una apuesta que no dio resultados. pic.twitter.com/8iYSmfKs8q
— Agence France-Presse (@AFPespanol) 8 de enero de 2019
Francia es el primer destino mundial de nudismo: con 2,6 millones de ejercitantes en el país, la cifra supera los cuatro millones de personas en verano repartidas en playas y cámpines, según datos de la Asociación de Nudistas de París (ANP).
No obstante, esta práctica se había mantenido alejada de la capital hasta hace poco, especialmente con la apertura en 2017 de un espacio nudista en el bosque de Vincennes, un pulmón verde ubicado en el este.
Además del restaurante, el año pasado se organizaron eventos mediáticos como la visita al Palacio de Tokio, un museo de arte moderno y contemporáneo, que recibió 30 mil demandas para unas 160 plazas, y la celebración de la primera Jornada Parisina de Nudismo.
Para Cedric Amato, vicepresidente de la ANP, es “demasiado temprano” para que la capital francesa acoja un restaurante de este tipo abierto todo el año.
“Desnudarse para ir a comer, no es algo que se haga día sí día no”, dijo a la agencia AFP.