A lo largo de la última década las películas animadas del gigante del entretenimiento se han esmerado en mostrar la diversidad, ejemplo de ello está en su más reciente estreno en donde puede verse un pueblo indígena en ‘Frozen 2’.
El surgimiento de esta inclusión pudo ser notorio desde 2009 cuando la compañía mostró a la primera princesa afroamericana con Tiana, que apareció en ‘The Princess and the Frog’, por lo que el estudio ha buscado inspiración más allá de los cuentos de hadas europeos.
‘Moana’, con su entorno polinesio, fue quizás el más destacado y notorio en los últimos años, pero ‘Frozen’ no se quedó atrás.
La película de las hermanas Elsa y Anna incluyó influencias de los pueblos sami, es decir culturas indígenas de Escandinavia.
Sin embargo, hay una otra cara de esta diversidad, ya que algunos acusan a Disney de apropiación cultural, es decir tomar la cultura de las personas y comercializarla para hacer dinero rápido.
Ahora, con ‘Frozen 2’, parece que han intentado estar un paso por delante de la curva ya que gran parte de la historia se centra en las personas de Northuldra, que están inspiradas en el mismo pueblo sami, al igual que la historia original de ‘Frozen’.
Pero antes de realizar la película, Disney celebró un contrato con el pueblo sami para garantizar que su cultura y tradiciones estuvieran representadas con precisión.
El contrato afirma que las historias y la iconografía utilizadas en la película siguen siendo propiedad de los sami, que los beneficios de la película se compartirán con ellos y que ‘Frozen 2’ tratará su cultura con respeto.
Con esto en mente, Disney acordó lanzar una versión doblada de Frozen 2 en un idioma sami, les dio crédito por su cooperación para hacer la película, se aseguró de que los representantes sami asistieran al estreno y que haya una iniciativa de aprendizaje cruzado.
Es un acuerdo bastante completo y debería beneficiar a ambas partes y de ese modo los espectadores puedan disfrutar de un pueblo indígena en ‘Frozen 2’ que ya puede disfrutarse en las salas de cine.