La exitosa serie de Netflix, que ahora es prácticamente una de las que mantiene a los fanáticos en la plataforma, en un momento se pensó que no tendría futuro. Esto lo revela una actriz, quien en una reciente entrevista revela los problemas tras grabar la primera temporada de un show que ya va para la cuarta y que no será la última, Natalia Dyer creyó que ‘Stranger Things’ no se renovaría y nos cuenta todos los detalles, así como los problemas con los menores del grupo.
Se sabe que Matt y Ross Duffer estuvieron buscando diversas casas productoras para poder crear esta idea, pero las puertas seguían cerrándose. A su favor podemos decir que se trata de un proyecto complejo y fuera de lo común, ambientado en una época específica que hacen más complicadas las grabaciones, por lo que el éxito llegó de sorpresa para todos.
El guion, los actores, la música y hasta la tipografía del intro, todo este combo ganador fue suficiente para hacer una de las series más exitosas del momento, pero no siempre fue así. Natalia Dyer creyó que ‘Stranger Things’ no se renovaría para una segunda temporada, afortunadamente se equivocó.
“Nadie sabía si volvería a ser recogido después de que termináramos de filmar la primera temporada”, dijo Dyer para The Independent. “Realmente había un aire de ‘puede que nunca nos volvamos a ver'”.
Apenas y los prepararon para las ruedas de prensa y como evitar hacer spoilers, pero esto no evitó que los fanáticos quisieran más de este proyecto que terminó por convertirse en uno de los más queridos del público, en parte por llevarnos de regreso a los ochenta.
“Nadie tenía idea del éxito que tendría el programa”, dijo Dyer. “No hubo preparación, no podría haberla, incluso si lo hubiéramos sabido. Fue sorprendente y abrumador. Entonces fue como, ‘Está bien, así es como es ahora'”.
Pero no todo es perfección, la actriz también se tomó un tiempo para hablar sobre un preocupante tema que es muy notorio para los fanáticos, los más pequeños de la serie están siendo víctimas de sexualización por parte del público y eso no está bien bajo ningún motivo.
“Hay tantas capas sucediendo aquí”, dijo Dyer. “En general, siento que, para mí, es sexualizarlos. Me siento protector con los niños más pequeños, aunque ya no son niños, son adolescentes. Todos son grandes personas y todos tienen que crecer en circunstancias muy locas. Como persona privada, simplemente quiero dejar a las personas en paz, a menos que hable de su trabajo o de lo que quieran hablar. Es un tema muy complicado”.
“[Sexualizar a los actores jóvenes es] un problema cultural, debe haber un concepto más amplio detrás de por qué”, continuó Dyer. “Deja que las personas sean las personas que son, sin ningún tipo de juicio”.