Tal vez nadie le avisó que cuando te tatúas algo de tu pareja, inevitablemente la relación termina. Sabemos que a la actriz mexicana le gusta mucho la tinta en la piel, pero no siempre hace las mejores elecciones y por eso Eiza González se borró un tatuaje.
De su ex.
Ahora, ha confesado que su último tatuaje fue en realidad un ‘cover up’ para eliminar el rastro de un amor pasajero.
Pero, ¿por qué se hizo un tatuaje en honor a un novio para empezar?
En una entrevista que la González dio para el portal WhoWhatWear, confesó que no creería que llegaría a aborrecer el diseño.
“Creía que sería como el tatuaje que Angelina Jolie se hizo cuando estaba con Billy Bob Thornton y que no me importaría seguir teniéndolo aunque rompiéramos. Pero bueno, no fue así. Ya me he cansado de él”.
Evidentemente, nadie le comentó a la intérprete mexicana que Angelina acabó borrando el dibujo de un dragón acompañado del nombre de su entonces marido que se hizo en el brazo, y que se encontraba en el mismo sitio en que ahora luce las coordenadas de los lugares de nacimiento de sus seis hijos y de su otro ex Brad Pitt.
Ay, Eiza…
Ahora nos preguntamos, ¿quién es ese amor que ya no quiere recordar?
La última relación ‘estable’ de la actriz mexicana fue con el actor Josh Duhamel (ponemos estable entre comillas porque no duraron ni 3 meses) y hay un par de coincidencias: mientras estuvieron juntos , la mexicana se hizo una constelación en el brazo izquierdo.
Si nos ponemos en modo ‘FBI’ podremos encontrar que en sus publicaciones de Instagram, hace no más de mes y medio visitó a su tatuado favorito para hacerle un dibujo justamente en el brazo izquierdo.
Aquí la evidencia:
La fotografía de la izquierda es de septiembre de 2018, fechas por las que estaba en una relación con Duhamel. La de la derecha es de a penas hace 6 semanas y podemos ver que se trata del mismo brazo a la misma altura.
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