El Grinch, uno de los personajes más icónicos de la Navidad, tiene detrás una historia llena de datos poco conocidos. La versión cinematográfica protagonizada por Jim Carrey ganó el Oscar a Mejor Maquillaje, reconocimiento al complejo proceso de transformación del actor, que tomaba más de tres horas diarias y requería un traje que pesaba aproximadamente 23 kilos.

Además del impresionante trabajo físico, muchas de las frases más recordadas del personaje fueron improvisadas por Jim Carrey, como la célebre línea de su agenda: “6:30 PM cena conmigo, esa no la cancelaré”. Estas aportaciones ayudaron a darle una personalidad única y memorable al personaje en la pantalla.

El origen del Grinch se remonta a 1957, cuando Dr. Seuss lo creó como una crítica directa al consumismo excesivo de la Navidad. A lo largo de los años, el personaje ha evolucionado hasta convertirse en un símbolo cultural que mezcla humor, reflexión y redención. ¿Te sabes algún otro dato curioso del Grinch?